La alegría de las ordenaciones

Queridos hermanos y amigos!

Una ordenación sacerdotal o de diácono es toda una experiencia por estas tierras! 

Burundi es una tierra de fe sin parangón, cuyo pueblo tiene una inmensa capacidad religiosa.

Ordenación sacerdotal (23.04.17)

En abril de este año (domingo 2º de Pascua), tuvimos la bella experiencia, el gran regalo, de la ordenación sacerdotal de dos hermanos: Jean Marie (Juan María) y Longin (Longino) que son ahora dos felices padres de Schoenstat, trabajando codo a codo con nosotros, el resto de los padres.
 

P. Jean Marie

P. Longin

Ordenación de diáconos (08.07.17)

El sábado 8 de julio tuvimos aún una nueva experiencia feliz: la ordenación de diáconos de dos otros hermanos: Léonce (Leoncio) y Christophe (Cristóbal). 

Léonce y Christophe ya ordenados diáconos

Les cuento como explicación, que – según nuestra costumbre local de Padres de Schoenstatt – cuando tenemos ordenación de diáconos lo hacemos junto con las ordenaciones de la diócesis, y cuando se trata de la ordenación sacerdotal, lo hacemos donde nosotros en nuestra gran iglesia de peregrinos en Monte Sión Gikungu.

El interior de nuestra iglesia de peregrinos, dedicada a la Stma.Trinidad

 

Nuestra iglesia de peregrinos, vista desde el exterior

Partimos, entonces, 8 de nuestros padres, con todas nuestras vocaciones: candidatos (9), novicios (10), estudiantes (17), además de las hermanas que nos colaboran, parientes, etc., en dos buses que alquilamos. En total unas 70 personas. 

La ordenación tenía lugar en una parroquia perdida en medio de las montañas a 2 horas de camino desde Bujumbura con el bus. 

La costumbre de las diócesis aquí en Burundi es alternar el lugar de las ordenaciones en diferentes parroquias, de modo que los feligreses de cada parroquia – que tienen mucho interés en estar presente en el suceso, y también de ser anfitriones – puedan vivir intensamente este gran acontecimiento.

Procesión de entrada

Canto de Gloria a Dios

Para mi, era imposible de contar tanta gente. Venían caminando desde muy lejos para vivir este acontecimiento. Venían hombres y mujeres, familias enteras con sus niños (guaguas, niños y jóvenes), habían caminado horas para llegar. 

Después tomaban lugar en las colinas aledañas que rodeaban una gran cancha de fútbol, transformada en altar. 

Ofertorio: Presentación de las ofrendas

Ofertorio: Presentación de las ofrendas

Yo creo que eran mínimo unas 10.000 personas y máximo, no sé, entre 20 y 30 mil. Habían venido motivados por la fe, traen algo de cocaví, y viven la experiencia: una misa de 5 horas: con cantos, danzas, música, colorido en la cual participan intensamente. 

Después deben iniciar un camino a pie de varias horas de nuevo, hasta llegar a comer y a descansar en sus hogares. 

Es una experiencia total. 
¡Para ellos la fe es muy importante y vale la pena el sacrificio!

Resumiendo: el sábado 8 de julio el arzobispo de Bujumbura ordenó 5 sacerdotes de su diócesis (ninguno nuestro), 9 diáconos (2 nuestros) y confirió el ministerio del lectorado y el acolitado: fueron 16 lectores (1 nuestro) y 14 acólitos (5 nuestros).

Para terminar les muestro un vídeo en el momento de la acción de gracias, después de la comunión. 

¡Estamos muy felices!

¡Hasta muy luego!*

* En mi próxima entrada les hablaré de María Ayuda en Burundi (Mariya Arafasha) y les pediré colaboración (Campaña "Ayúdame a estudiar"). Gracias.